Lo primero que debes hacer es informarte antes de que nazca tu bebé sobre las reglas de tu trabajo para las mamás que amamantan. La oficina de recursos humanos te puede ayudar.
- Conoce tus derechos como mamá lactante. Aprende sobre las leyes que protegen tu derecho a extraerte leche materna en el trabajo.
- Visita el sitio web del Programa de Lugares de Trabajo que Apoyan a las Mamás en Texas para saber si tu lugar de trabajo es uno de esos lugares. Este programa promueve que las mamás continúen con la lactancia materna cuando regresen al trabajo
- Habla con tus amigas y familiares. Averigua si tienen experiencia con la lactancia después de volver al trabajo y pídeles su apoyo.
- Platica con tus compañeras de trabajo. Si hay otras mamás que se hayan extraído leche en el trabajo, aprende lo más que puedas de sus experiencias. Si alguien más está embarazada o amamantando a su bebé, considera tener una reunión para hablar con tu supervisor en equipo y hacer los arreglos necesarios para designar un área y un horario para la extracción de leche.
- Habla con la oficina de recursos humanos si tu trabajo cuenta con una. Ellos conocen las políticas o programas que pueden ayudarte a continuar con la lactancia después de volver al trabajo. Algunas empresas grandes ofrecen programas de salud o de relaciones con empleados o cuentan con enfermeras ocupacionales que podrían ayudarte a tener la plática con tu supervisor.
- Antes de la reunión, practica con tus amigas o familiares lo que planeas decir a tu supervisor. Esto te puede ayudar a relajarte y sentirte preparada.