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Simple, pero muy beneficioso
El contacto piel con piel es cuando el bebé se acurruca sobre el pecho desnudo de su mamá o su papá. El contacto piel con piel beneficia a todos los bebés, no importa si son amamantados o toman fórmula para bebés.
Los beneficios del contacto piel con piel
Los bebés necesitan mucho contacto piel con piel con su mamá y su papá, en el hospital y en la casa.
El contacto piel con piel:
- Te calma a ti y a tu bebé.
- Ayuda a que el bebé llore menos.
- Estabiliza la temperatura, la respiración, el ritmo cardiaco y el nivel de azúcar en la sangre de tu bebé.
- Ayuda a que el calostro fluya más fácilmente.
- Mejora el sistema inmunitario de tu bebé y ayuda a protegerlo de enfermedades.
- Ayuda a tu bebé a aumentar de peso.
- Reduce la posibilidad de que sufras trastornos del estado de ánimo después del parto.
- Te da la oportunidad de descansar o hacer una pausa.
- Crea una conexión entre tú y tu bebé que dura toda la vida.
Cómo empezar el contacto piel con piel
La primera hora después del parto se conoce como la “hora sagrada”. Es un momento especial en el que se crean lazos afectivos que comienza cuando colocas a tu bebé piel con piel sobre tu pecho, justo después de su nacimiento. Tu bebé se calmará al escuchar el latido de tu corazón, y olerá la leche materna. Trata de mantener a tu bebé en contacto piel con piel sobre tu pecho sin interrupciones hasta que termine su primera toma.
Si tu bebé no puede tomar el pecho durante la primera hora después de nacer, pide ayuda para extraerte la leche a mano. Esto te ayudará a empezar a producir leche, incluso si tu bebé no puede aún agarrarse al pecho.
Haz un plan para el contacto piel con piel en el hospital
Incorpora el contacto piel con piel a tu plan para el parto. Habla con tu médico y el personal del hospital para confirmar que apoyan el contacto piel con piel.
- Pregunta en el hospital si facilitan el contacto piel con piel después de los partos con cesárea, cuando la mamá y el bebé estén despiertos y estables.
- El papá puede llevar una camisa que pueda desabrocharse para acurrucar fácilmente al bebé en contacto piel con piel.
- Informa a tus familiares y amigos sobre tus planes. Diles que necesitas privacidad cuando quieras tener contacto piel con piel con tu bebé en el hospital y en la casa.
- No hay una edad concreta a la que se debería dejar de practicar el contacto piel con piel. Este ofrece grandes beneficios a tu bebé durante su primer año de vida.
La seguridad y el contacto piel con piel
Cuando tienes a tu bebé en contacto piel con piel sobre tu pecho, es importante que te asegures de que puede respirar. No debe tener la barbilla demasiado inclinada hacia adelante, y su nariz y su boca deben estar siempre descubiertas. Recuerda:
- Pon a tu bebé en contacto piel con piel cuando estés segura de que no te vas a quedar dormida. Si te durmieras en ese rato, podrías bloquear fácilmente las vías respiratorias del bebé. Puedes pedirle a tu pareja, a uno de tus padres o a una enfermera que los vigilen a ti y a tu bebé si te sientes cansada.
- Mantén a tu bebé en posición vertical.
- Asegúrate de que la cabeza del bebé esté volteada hacia un lado y con la nariz hacia arriba, como si estuviera olfateando, para que pueda respirar con facilidad.
- Ponle un pañal y una gorra a tu bebé.
- Cubre la espalda de tu bebé con una cobija para que ambos estén a gusto y calientitos. No dejes que las cobijas le tapen la nariz o la boca.